Cómo aumentar el placer femenino
El placer femenino es complejo (nos enseña el mito de Tiresias) y diferente para cada persona, pero podemos esbozar algunos consejos generales para aumentarlo. Repito que son sugerencias y no reglas: prueba, si quieres, pero sobre todo experimenta porque es la única manera de entender realmente lo que te gusta.
Como ya dije en el artículo sobre las zonas erógenas , recordemos primero que los genitales no sólo existen con penetración.
Estimulamos todos los sentidos si es posible con luces tenues o completamente encendidas para disfrutar de todo, música o ruidos que nos gusten, caricias por todo el cuerpo y con diferentes sensaciones como calor o frío.
Una forma de aumentar el placer femenino es estimular múltiples zonas erógenas, ya sea por separado o simultáneamente.
A algunas personas les gusta tener estimulación del clítoris y de la vagina al mismo tiempo. Esto se puede conseguir de varias formas: penetración y juguetes sexuales para el clítoris, penetración y estimulación manual del clítoris por parte de la pareja o por la propia persona (y no debe verse como un “no soy suficiente” porque no es así: el coito no es una competición para ver quién es mejor, es un disfrute mutuo, una diversión juntos. Lo mismo ocurre con los juguetes sexuales: no deben verse como sustitutos, sino como una ayuda para vivir ese momento al máximo).
Incluso el sexo oral tocando simultáneamente la vagina y algunos puntos de placer como el perineo (la parte entre el final de la vulva y el ano), la pared vaginal anterior en puntos específicos como el punto G o zona CUV, la parte más profunda de la vagina cerca del cérvix y en los fórnices (que son esas partes de la vagina que están alrededor del cérvix). No olvidemos otras zonas erógenas estimulantes como el cuello, los senos y los pezones.
Siempre preguntamos si es preferible la estimulación simultánea o separada, si la persona no lo sabe sólo queda una cosa por hacer: ¡experimentar! Siempre con atención y respeto.
En cuanto a la penetración: algunas mujeres encuentran la penetración superficial, justo más allá de la entrada vaginal, extremadamente placentera. Esto puede llevar a orgasmos muy intensos que pueden intensificarse aún más si se utilizan los descansos con prudencia. Para algunas personas, detenerse justo antes del orgasmo aumenta el placer porque “se vuelve a empezar” y el orgasmo es entonces más intenso. Para otros, sin embargo, podría suponer una pérdida de ese “momento” que todavía es difícil de alcanzar: podría ser el placer que se buscaba, de lo contrario tratemos de entender juntos cómo continuar.
En todo esto habrás notado que nunca se ha hablado del tamaño del pene y esto es porque hay estudios que demuestran como son irrelevantes para la consecución del placer femenino. ¡Es mucho más importante tener las uñas cortas para una estimulación manual placentera y sin rasguños!
Consejo final: recordemos siempre que además de comunicación, también se necesita tiempo. Las relaciones sexuales rápidas pueden ser excitantes y satisfactorias, pero aquellas en las que te tomas tu tiempo pueden ser muy satisfactorias, especialmente en términos de mayor placer.
Artículo de Silvia Boselli - Matrona experta en rehabilitación del suelo pélvico
